La legislación estadounidense no permite que se demanden a spammers salvo seas un ISP o el gobierno, por lo que un abogado tuvo la brillante idea de crear un ISP para perseguir judicialmente a quienes están detrás de los anuncios de \/!@6R@.
Todo iba bien hasta que James Gordon demandó a Virtumundo y perdió, teniendo que pagar los USD $110.000 de gastos legales por parte de la firma que los defendió. Como si esto no fuera suficiente apeló y el pago aumentó, ya que la corte determinó que claramente se trataba de un litigante profesional tratando de abusar de la ley y no de un ISP.
La «empresa de marketing» envió la deuda de Gordon hacia una agencia de cobranzas y lo llamó para decirle que si abandonaba la demanda olvidarían la «deuda», oferta que Gordon rechazó incluso cuando llegó la empresa de cobranzas a embargar sus posesiones. Luego de perder la apelación la agencia de cobranzas vendió los bienes y Gordon se quedó sin pan ni pedazo.
No me agrada ni el SPAM ni los abogados, pero el enemigo de mi enemigo es mi amigo y me hubiese gustado ver cómo les secaba las cuentas bancarias, una pena.