En una reciente encuesta a más de 300 trabajadores londinenses, un 28% de ellos respondió que se llevan su notebook o «dispositivo de computación móvil» (léase Blackberry) para trabajar en la cama, y que casi el 60% de sus parejas lo encuentran un hábito molesto.
El tiempo que trabajan en la cama tampoco es menor, variando entre 2 y 6 horas a la semana en más de la mitad de los encuestados, con un 8% admitiendo que pasan más tiempo en sus dispositivos móviles en la tarde que hablando con sus parejas. Otra cosa que hacía más de la mitad de los participantes en la encuesta era subir o descargar información corporativa sensible a su dispositivo móvil al estar en la cama utilizando en su mayoría conexiones inalámbricas con un 20% de ellos utilizando conexiones no seguras.
Una parte deprimente del estudio es que un 4% de los encuestados terminan de trabajar y revisan el correo antes de irse a dormir, mientras que el resto le dice buenas noches a sus parejas, algo que sin duda debe ser muchísimo peor en países como Japón donde la crisis reproductiva es enorme. Están dejando de lado a la familia o la polola por los reportes que tenían que tener listos para ayer a las 5 o el clan de WOW?