En el sector de las compañías tecnológicas y de otros rubros, donde la competencia es férrea, los secretos como información comercial, tecnológica, científica, entre otras, representan un patrimonio de inconmensurable valor para una empresa de cara a la competencia y el mercado. Un ejemplo claro y son los secretos de Coca Cola Company, respecto a la formula de su mundialmente conocida gaseosa, tratada de imitar por la competencia, pero sin lograr con exactitud el sabor de la Coca Cola Original.
En el sector tecnológico sucede algo similar respecto a la información que puede valer el futuro de la empresa, en este sentido las empresas se resguardan cuando a sus empleados le confían información clasificada como altamente secreta, incorporando cláusulas contractuales que por ejemplo le prohíben durante un determinado tiempo trabajar para la competencia o divulgar estos secretos bajo penas judiciales.
En este sentido Google y Microsoft han tenido disputas al respecto en el pasado, pero lo mas reciente ha acontecido entre IBM y Apple, ya que como informamos en esta nota, Apple le ofreció trabajo, más un suculento contrato a Mark Papermaster, un ingeniero altamente calificado de IBM, donde se desempeñaba como Vicepresidente de desarrollo de tecnologías de microprocesadores, a quien Apple le ofreció nada menos que ocupar el cargo de jefe en su división de negocios a cargo del iPod, puesto que dejara bacante Anthony Fadell, a quien se le considera «el padre del iPod», luego de retirarse de Apple hace pocos días.
Pero al asunto para que Papermaster y Apple no será nada de fácil, ya que tal como comentamos en la nota respectiva, IBM ha llevado el caso a la corte del distrito sur de Nueva York, quien en mandato del Juez de turno Kenneth Karas, ordenó en primera instancia y de manera cautelar fallar a favor de IBM, dictando que Papermaster «inmediatamente cese su trabajo en Apple hasta próximo aviso», es decir, Papermaster no podrá que por ahora trabajar para Apple hasta que no se dicte el fallo definitivo, que podría marcar el futuro laboral de Papermaster. (Aqui un copia del dictamen).
El aludido, sin embargo, se defiende argumentando que el trabajo que realizará en Apple, será completamente distinto al realizado en IBM y que Apple lo ha contratado no por sus conocimientos respecto a las tecnologías secretas de IBM, sino más bien por su capacidad de gestión. Sus abogados dijeron además que mantenerlo por 1 año fuera de la industria seria extremadamente perjudicial para su carrera, ya que como está la situación, Papermaster no volvería a IBM de obtener un fallo desfavorable.
IBM por su parte aludió a un tecnicismo, esgrimiendo que todos los dispositivos electrónicos, sean estos grande y pequeños, son alimentados por el mismo tipo de tecnología, el microprocesador, donde PaperMaster tiene altos conocimientos al respecto luego de liderar dicha división en IBM, y en donde esta ultima teme que dichos conocimientos sean usados por Apple para crear su próxima familia de chips para sus reproductores portátiles iPod y iPhone.
Como vemos IBM gana el primer encuentro, ya veremos que resuelve la corte en su sentencia definitiva.