Una no muy grata noticia ha obligado a Intel a informar mediante nota de prensa un defecto en el diseño de sus últimos chipset Intel 6 series “Caugar Point” (P67/H67) que acompañan a los procesadores “Sandy Bridge” y que degradan el rendimiento de los puertos Serial-ATA (SATA) de las placas basadas en estos chipset. La compañía ha detenido el envió de los chipset afectados y está trabajando junto a sus socios OEM para solucionar este problema y aplicar las reparaciones o reemplazos respectivos de los productos.
As part of ongoing quality assurance, Intel Corporation has discovered a design issue in a recently released support chip, the Intel® 6 Series, code-named Cougar Point, and has implemented a silicon fix. In some cases, the Serial-ATA (SATA) ports within the chipsets may degrade over time, potentially impacting the performance or functionality of SATA-linked devices such as hard disk drives and DVD-drives. The chipset is utilized in PCs with Intel’s latest Second Generation Intel Core processors, code-named Sandy Bridge. Intel has stopped shipment of the affected support chip from its factories. Intel has corrected the design issue, and has begun manufacturing a new version of the support chip which will resolve the issue. The Sandy Bridge microprocessor is unaffected and no other products are affected by this issue.
The company expects to begin delivering the updated version of the chipset to customers in late February and expects full volume recovery in April.
El problema segun informa Intel afecta a algunos chipset manufacturados desde el Q42010 y que degradan paulatinamente el rendimiento de los puertos SATA de las placas madres basadas en la última generación de chipset de Intel (P67/H67), reduciendo el rendimiento de discos duros, unidades SSD o unidades ópticas que se conecten a dichos puertos.
Este problema tendrá un costo en reparación y reemplazo de los chipset afectados en el mercado de US$700 millones para Intel, que ya estima una baja en sus ingresos para el primer trimestre del 2011 de US$300 millones, de todos modos cifras abordables y pequeñas para el volumen de negocios de Intel que en el último reporte informó ingresos por $11.500 millones de dólares y utilidades por 3.400 millones de dólares.