La vida en Cuba es bastante difícil. Los amantes de la tecnología no pueden subsistir en la tierra de Fidel ya que el único acceso que se le permite a la gente es utilizar correos electrónicos, por lo que navegar la web es impensable. A travéz de tarjetas de memoria, hostings en el extranjero y redes de protección los bloggers cubanos deben ingeniárselas para publicar su visión de los hechos.
Yoani Sanchez está a cargo de escribir para Generación Y en el portal Desde Cuba. Ahí relata cómo es la vida «real» de los ciudadanos cubanos, las dificultades en el acceso a bienes básicos o historias de su infancia. Obviamente estos bloggers con agendas «alternativas» son un problema para el gobierno, por lo que cada vez trabajan más fuerte en mejorar los métodos de censura. Como cualquier régimen comunista que se respete la culpa la tiene Washington, ya que ellos están pagando a los bloggers para que realicen estas tareas, por lo que tienen el derecho a bloquear sitios que «alienten la suvbersión».
Fidel Castro en su columna publicada en el portal Cubadebate.cu informa que las entradas están llenas de teorías políticas desgastadas que los Estados Unidos han utilizado para incluir a cuba en su lista negra, mientras que la prensa oficialista la ridiculiza como una mujer que se ve como el centro de todas las persecuciones.
Los métodos que los bloggers utilizan para publicar sus historias son diversos. Escriben sus textos desde sus computadores personales traídos prácticamente de contrabando y los guardan en pendrives o tarjetas de memoria para luego enviarselos en un correo a alguien de confianza que publicará la entrada o utilizar el acceso a internet desde algún hotel donde el costo por hora es de USD $8, la mitad del sueldo promedio en cuba. El gobierno contraatacó prohibiendole a los hoteles prestarle servicio a ciudadanos cubanos y diciendo que tienen acceso a herramientas avanzadas debido al sueldo que reciben por parte de gobiernos extranjeros.
[SMH vía The Inquirer]