No, no estamos hablando de una nueva droga, sino que de los monitores que aburrieron a todo el mundo excepto gamers y diseñadores hardcore que no pueden dejar la gama tonal y tiempo de respuesta de lado. Según la Comisión Europea, Philips, Samsung, Chunghwa Picture Tubes, LG Electronics, Toshiba y Matsushita (Panasonic) se involucraron en una colusión de precios para evitar que el precio de los televisores y monitores CRT disminuyera, afectando enormemente a los habitantes de Europa Oriental y el sur de la región.
Estas acusaciones salen a la luz luego de una investigación que partió el 2007 y tomó dos años en completarse, indicando que mientras la demanda por televisores y monitores CRT disminuía a prácticamente cero, los fabricantes se negaron a bajar los precios, decisión que afectó a las familias de menores ingresos en Europa. Durante ese mismo periodo de tiempo diversos fabricantes de LCDs también estuvieron involucrados en la manipulación artificial de los precios de éstos mismos, repitiéndose varias empresas en ambos casos.
A diferencia de Estados Unidos, en Europa los «carteles» no están sujetos a penas criminales, por lo que es más difícil combatirlos. De cualquier modo, la Comisión Europea puede multar a las empresas por hasta un 10% de sus ingresos totales durante el año, cosa que no le haría mucha gracia a los infractores.