En el colegio cuando tenía prueba de historia siempre me iba mal. La memoria nunca fue mi fuerte (quizás por eso me gusta tener tanto pendrive) así que por eso di la PSU de Historia y Ciencias Sociales, y me puse a estudiar periodismo. No, no se equivoque, esta intro sentimentaloide es para reforzar la idea de que debemos conocer de donde venimos para saber hacia donde vamos.
La Internet nace gracias a los científicos, eso no es novedad, pero en realidad nace gracias a su enredada forma de escribir. Si tomas cualquier ‘paper’ científico puedes encontrar referencias, notas al pie y cuanto concepto científico se te ocurra. De estos papers podemos encontrar en centros científicos. Centros científicos como el CERN, el mismo que vemos con temor por la posible posibilidad de que destruya al mundo por crear un hoyo negro. Sí, el mismo lugar donde ahora está el Gran Acelerador de Hadrones es la cuna de la web como la conocemos.
Es marzo de 1989 y Tim Berners-Lee presenta a la organización su “Manejo de Información: una propuesta” (Information Management: A Proposal). Al revisar las páginas de esta propuesta saltan a la vista algunas de las características del centro científico, y que promovieron a la Internet como la conocemos hoy. Pero hay que saber antes de seguir leyendo, que no se piensa en crear una web como la vemos, y creamos, hoy en día.
En el tiempo que se presenta la propuesta, la pérdida de información y el desorden de las diferentes bases de datos del CERN hacen una tarea titánica el recopilar o encontrar una información. Según Tim, el centro es como “un pequeño mundo” en su organización, una red. Y ya saben lo difícil que es encontrar una calle exacta al otro lado del mundo (en tiempos en que Google Earth era sólo un sueño).
Sus bases de datos y newsgroups, la implementación más de la red más impresionante del momento, estaban bajo el formato de árbol, pero “la información no está naturalmente organizada en un árbol”. Por eso Berners-Lee propuso el nuevo y superahilupi sistema del hipertexto. Su primer ‘navegador’ fue creado en 1980 y lo llamó Enquire. “Imagina, entonces, las referencias del documento, todas asociadas con la dirección en la red que indica esa referencia (al estilo de los documentos científicos), entonces pueden ir saltando de un documento a otro sólo con un clic del mouse”.
He ahí el gran aporte de nuestro maestro Tim, las bases que apoyan el hipertexto o “información enlazada ente sí de forma no lineal”. Sólo recordemos que en el código html para señalar un link debemos escribir o hipertext reference. Pero no se quedó en eso y vio más allá, usó la palabra ‘hipermedia’ (ojo, en 1989) viendo el potencial de la interconexión que pretende impulsar.
Para crear esta red lo primero es estandarizar la red y los medios de reproducción de los hipermedia que Tim piensa podrían interrelacionarse. También deben estar separados los software de almacenamiento y los que visualizan la información, cosa que no sucedía hasta ese momento. Allí nace el modelo cliente/servidor.
El texto de Tim Berners-Lee pone énfasis en las bases de datos científicas pero en las conclusiones se manda algunas palabras para el bronce:
“Debemos trabajar entorno a un sistema de información interconectada universal, en el cual la generalización y la portabilidad son más importante que técnicas gráficas y complejas facilidades extras.”
Es muy interesante que la web se haya dado una vuelta tan grande para llegar a sus inicios. Nosotros la conocimos unidireccionalmente, pero ahora vuelve a tener el espíritu inicial de este texto publicado hace 20 años con la mal llamada web 2.0, pues esta amigos y amigas, es la verdadera red de redes. Otro punto importante es que esta idea nace en el CERN, misma institución que, con el actualmente en reparaciones LHC, ha puesto las bases de ‘la nube’ de Internet. “Después podremos ver porno en la grid (lo que nosotros llamamos nube de la red)” me dijo una vez un físico chileno en el proyecto del Colisionador de Hadrones (gracias Daniel!).
Revisa el texto completo (inglés) en el archivo de la W3C. Foto Flickr (computador del tío Tim: «Esta máquina es un servidor, No apagar!«)