Es muy común observar que el avance de la tecnología siempre va de la mano del sector bélico, lo cual es más que lamentable. En efecto, la mayoría de los avances que ya están en el mercado disponibles para el usuario común, han tenido su origen en investigaciones militares. Sin ir más lejos, ayer les contábamos una noticia que mostraba los deseos del Departamento de Defensa de USA, de crear robots del tipo Terminator. Es por ello, que la noticia que ahora les contaremos, muy relacionada con la que les recordábamos, entrega cierta luz de esperanza a todos.
Las personas mayores de edad y aquellas incapacitadas, podrían pronto recibir la ayuda de un robot, en sus quehaceres domésticos, desarrollado por el MIT («Instituto Tecnológico de Massachusetts«, del inglés «Massachusetts Institute of Technology»). Investigadores de esta prestigiosa casa de estudios han estado trabajando en Domo, un robot que puede ordenar objetos, devolviéndolos a sus lugares de origen, ya sea a mesas o estantes, por medio de comandos verbales.
El robot es capaz de detectar movimiento, distancia, e incluso rasgos faciales humanos, por medio de dos grandes ojos. La información de esos ojos es entregada a nada menos que 12 Computadores.
Los ojos y los Computadores de Domo están entrenados para reconocer caras humanas y movimientos inesperados. El robot también entiende comandos básicos para traer y ubicar objetos caseros. Como un niño, Domo usará la mano izquierda para calcular la distancia y luego agarrará el objeto con la derecha.
Aaron Edsinger es un asociado del MIT y ha estado trabajando en Domo por 3 años. Edsinger incluso promete que Domo, y futuros robots, podrán ayudar a los discapacitados en sus tareas diarias. Él cree que el futuro de estos complejos dispositivos está en llevar a cabo tareas cotidianas.
Según las palabras de Edsinger,
«El potencial real de los robots en el futuro, será alcanzado, cuando ellos puedan hace varias tareas manuales.»
Los robots actuales, como los que se encuentran en las líneas de ensamblado, tienen limitadas libertades y siguen un patrón definido y fijo. Aquellos destinados al hogar, como el robot aspirador Roomba, no hacen otra cosa que aspirar (para el caso del robot mencionado), objetivo para el cual fue diseñado.
El proyecto fue originalmente financiado por