Luego de años entregando tarjetas gráficas con un rendimiento menor que estelar, componentes que se sobrecalentaban y «artifacts» a diestra y siniestra los OEM están empezando a darle la espalda a NVIDIA en el mercado de los Notebooks. Un perfecto ejemplo es Dell, quien está eliminando poco a poco todas las tarjetas gráficas NVIDIA ya las tiene fuera de todas sus líneas excepto tres modelos XPS y unos cuantos equipos de la línea AIW que recibe un refresco más lento que sus similes. Esta medida es un claro indicio de que las relaciones de NVIDIA con los fabricantes no están en su mejor punto y que la arrogancia de la empresa verde les está pasando la cuenta. Considerando el peso que -aún- tiene Dell en el mercado esta jugada afectará bastante a NVIDIA y a menos que se adelanten a ATI con sus tarjetas gráficas para DX11 o hagan descuentos demasiado buenos como para rechazarlos tendrán un muy difícil 2009. [The Inquirer]
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