Acabo de enterarme de este servicio a travéz de ars. En palabras simples es un cliente P2P que distribuye música L E G A L M E N T E. ¿Interesado?
Aunque debió haberse lanzado hace más de un año, las negociaciones con las disqueras hicieron que fuera casi imposible cumplir la meta. El proyecto durante un tiempo se convirtió en un circo mediático debido a que el autor se jactaba de tener acuerdos con todos los grandes sellos cuando no había documento alguno firmado y después de poder conseguir todos los documentos legales para lanzar el servicio a mediados del año pasado el equipo de desarrollo se dedicó a pulir los diversos fallos que éste tenía. Ya siendo Febrero de 2009 estamos a pasos de la versión 1.0 del servicio pero la Beta ya se ve bastante prometedora. Lee el resto después del salto.
Lamentablemente Qtrax utiliza archivos WMA con DRM, por lo que los usuarios de Linux y OS X quedan fuera por ahora. Para distribuir música se utiliza el protocolo Gnutella (el mismo protocolo que usa Ares) y está basado en Songbird, mi reproductor de audio favorito. Aunque no pagas con dinero por el acceso a la música monitorean de sobremanera tus gustos musicales para obtener una mejor idea de qué es lo que quiere la gente. Antes de instalar debemos crearnos una cuenta en Qtrax y posteriormente descargar el instalador.
Para instalar necesitas tener WMP 11, .net 2.0 y un par de actualizaciones para DRM, en el siguiente enlace Qtrax ofrece una herramienta bastante útil que realiza el chequeo y nos asegura tener todo en orden (como nota aparte, las pruebas las hice sobre la beta 7000 de Windows 7, por lo que usuarios de Vista no debieran tener problema alguno).
Una vez que compruebo tener todo en orden instalo el reproductor, lamentablemente el enlace desde el sitio de Qtrax está muertísimo, por lo que tuve que navegar por diversos sitios hasta dar con el archivo, puedes encontrar una copia acá. Lamentablemente Qtrax removió muchísimas de las capacidades multimedia de Songbird, como el reproducir archivos OGG.
Una vez instalado tendrán el asistente para importar su música desde el disco duro y se encontrarán con el -horrible respecto a songbird- skin que diseñaron para Qtrax:
Quienes utilizan Songbird encontrarán familiar el panel que aparece al navegar por el catálogo. Siendo bastante simple nos ofrece la opción de descargar el tema o comprarlo desde Amazon. Lamentablemente para poder realizar las descargas desde fuera de EE.UU. necesitamos utilizar un proxy, acá encontré varios que me sirvieron.
Una vez que lo tienes funcionando puedes disfrutar de la magia del botón download. La canción se agrega a una lista de descargas y una vez que está lista podemos reproducirla, pero sin antes pasar por una pequeña pausa donde el programa se conecta a lo que asumo es un servidor de autenticación. Lamentablemente al estar detrás de un proxy la espera debido a las latencias entre el cliente, el proxy y el servidor se hacen bastante largas, pudiendo llegar aproximadamente a los tres segundos, por lo que lamentablemente derrota el propósito del servicio.
Aunque podemos reproducir los temas en otros reproductores multimedia esta pausa se mantiene, por lo que no hay forma viable de utilizar los archivos descargados. Respecto al consumo de memoria del programa no tengo nada que decir, consume lo mismo que Songbird y es una alternativa lejos más liviana que iTunes, aunque comparada con winamp, xmms, o rhythmbox pierde sin lugar a dudas.
Una de las gracias de Songbird es el poder utilizar Addons, obteniendo desde Skins hasta un reloj despertador, pasando por complementos más ligados a la música como buscadores de letras y demases. Lamentablemente la «optimización» que hicieron los ingenieros de Qtrax eliminó toda posibilidad de hacer uso de éstos ya que, aunque podemos instalarlos y configurarlos, entran en conflicto con la UI modificada (NO recomiendo intentar cambiar el skin que trae el programa).
Para concluir y resumirles este largo review puedo decir que encuentro una lástima y un insulto a la inteligencia de quienes residen fuera de Estados Unidos el imponer un bloqueo geográfico al contenido y luego quejarse por los altos niveles de piratería en el mundo. Tener una herramienta así habría sido un éxito en Sudamérica, África, Asia y Europa Occidental, pero por ahora prefiero devolverme a Pandora o incluso iTunes Store.