El costo de las unidades GPS ha disminuído dramáticamente durante los últimos años, sobretodo para los rastreadores bluetooth que deben ser pareados junto a un teléfono celular o computador de escritorio. Uno de aquellos modelos es el Flaircomm BT560, una unidad que encontramos en el área retail por aproximadamente USD $30 capaz de convertir cualquier teléfono o computador en un poderoso GPS tope de gama.
¿Y por qué decimos tope de gama? Porque en mi opinión, lo que ganas en un GPS de 200, 300 o 500 dólares es un pequeño LCD para mostrar mapas rústicos si eres un deportista extremo, navegación guiada si te gusta andar en auto o simplemente la posibilidad de exportar los logs en formato GPX o KML para realizar trazados de terrenos en proyectos como OpenStreet Map o geotagging si te gusta la fotografía. El hardware no mejora mucho y simplemente ganas una autonomía que supone ser decente y una antena de buena calidad, pero adivina: puedes hacer lo mismo y de mejor manera con este GPS.
¿Cómo así? Se estarán preguntando. Nuevamente en mi caso personal el combo de GPS bluetooth mas dumbphone (Nokia 5310) equivalen a un costo muchísimo menor al de una unidad que me diera la misma flexibilidad en software y hardware. Digo hardware porque al ser simplemente un receptor que se conecta vía bluetooth la autonomía de la unidad rondaba las 20-25 horas, mientras que si llegase a acabarse la batería de ese teléfono siempre puedo conectarlo a mi segundo celular o un computador. Si es por software, la verdad es que GPS Track me funcionó sin problema alguno para generar los logs de mis caminatas y aplicaciones como GooPS te permiten conectar un GPS Bluetooth con Google Earth, por lo que es cosa de colocar los mapas en la caché si es que no tendrás internet en tu viaje y tu notebook o netbook se transforma en un GPS HD que reproduce películas, música, se conecta al internet y proporciona «entretenimiento para adultos» si es que la noche de campamento se vuelve aburrida. Si buscas software para una realizar alguna tarea más específica, siempre puedes revisar estos listados con software gratuito para unidades GPS tanto para PC como teléfonos.
En lo que concierne a la confiabilidad del equipo no tengo queja alguna. Al igual que en la mayoría de los GPS no asistidos, la señal se demoraba de 30 segundos a 5 minutos en aparecer en el software, algo a la par con la mayoría de las unidades GPS para consumidores. Si eso no es suficiente para tí puedes utilizar el puerto para conectar antenas externas y tus problemas se verán solucionados. De todos modos debo decir que en las zonas urbanas y áreas rurales de la quinta región no tuve necesidad alguna de recurrir a estos métodos.
La calidad de construcción del equipo es bastante buena pero no excelente, ya que puede crujir un poco si lo presionas demasiado y la terminación «piano paint» negra que tiene al medio se rayó con solo mirarla. El sticker con el número de serie y sellos gubernamentales en la parte trasera tampoco resistió mucho y los números ya se borraron, pero luego de más de 5 meses con la unidad puedo decir que no se te romperá a las dos semanas de uso o que la batería pierde su eficiencia luego de unas cuantas cargas.
Los únicos accesorios que el dispositivo trae son un cable USB que termina en un puerto propietario muy parecido al que variados MP4 chinos tienen y un cargador para auto que te entrega una salida USB, algo que se agradece si es que tienes más gadgets que cargar cuando viajas de un lugar a otro.
A modo de conclusión debo decir que para ser un equipo marca patito estoy conforme al 110%. Es bueno, es bonito, es barato y ha resistido los dedos de mantequilla métodos de tortura de Noir sin presentar problema alguno. Si estás interesado en un GPS con las tres B y no te hace gracia comprar algo de marca sólo por la marca, recomiendo el Flaircomm BT560 a ojos cerrados.