Suficiente ha evolucionado la tecnología de los monitores LCD como para competir en términos de resolución, ángulos de visión o tiempo de respuesta para el usuario común. Atrás quedaron los días de esos aburridos diseños negros con acentos plateados, es por eso LG se lució con el diseño del monitor en cuestión y nos enviaron una muestra para ver qué tan bien se comporta en el día a día.
Antes de dar inicio a este review queremos aclarar dos temas que nos parecen muy importantes. El primero tiene que ver con los monitores «LED» y la gran confusión que tiene la gente al ponerlos en la misma categoría que plasmas y LCDs. LED significa Light Emiting Diode (Diodo Emisor de Luz) y es lo que ilumina tu monitor, mientras que LCD es el tipo de pantalla. Antes de usar tecnología LED los paneles de los LCD utilizaban tecnología CFL (como los tubos fluorescentes de tu cocina), y tal como una lámpara puede emitir luz gracias a una vela, una ampolleta incandescente o un bulbo de ahorro energético un LCD puede utilizar diversas fuentes para iluminar el panel que muestra la imagen.Decir que tu televisor o monitor es un LED es como decir que tu notebook es un Windows o que tu teléfono es un Android.
De esto no podemos culpar a LG ni a ningún otro fabricante en particular, puesto que la misma gente fue la que alimentó esta ilusión (y si han trabajado en retail o servicio al cliente saben que casi nunca vale la pena corregir al cliente). El segundo punto sin embargo nos preocupa más y es una mala práctica en la que LG, Samsung y muchos otros fabricantes han agarrado en el último tiempo.
Si vemos el empaque del monitor notamos bien grande las 22″ que anuncia a través del modelo, pero en realidad no es un monitor de 22″, sino que 21.5″. ¿Cómo es posible? Anunciando el monitor como uno en la clase -o categoría- de 22″, lo cual es básicamente venderte algo que casi es del tamaño anunciado pero finalmente es menos. Esperamos que los fabricantes abandonen pronto el jueguito sucio de las categorías de las pantallas para que no se vuelva otra unidad de medida inservible como los GB anunciados versus los GB efectivos en unidades de almacenamiento. Afortunadamente varios retailers han tomado nota de la situación y anuncian el tamaño real en vez del aproximado.
Volviendo al monitor en sí debemos decir que nuestra primera reacción al ver el E2290v fue la misma que la de Roberto Manfinfla ante una mujer real babear ante tal diseño. El monitor se siente premium en todo sentido, tiene un diseño minimalista digno de cualquier película futurista y la parte trasera tiene una superficie reflectante ideal para una oficina elegante.
Cuando la gente de LG dice que es el monitor más delgado del mundo no cabe duda de lo afirmado. El grosor del monitor es el mismo que el de un bolígrafo salvo en el área donde conecta con el brazo de titanio que une la estructura a la base, donde se ensancha un par de milímetros.
En la base vemos cuatro botones táctiles para controlar el menú y un botón táctil para encender y apagar el equipo. Estos botones están iluminados de un color blanco y cuando éste se encuentra en reposo o sin señal la esquina del botón de encendido cambia a un color naranjo.
Como todo monitor ultradelgado encontramos la circuitería en la base. Encontramos la toma de la fuente de poder (cualquier transformador estándar de notebook nos sirve), un puerto DVI, uno VGA y una entrada HDMI que es capaz de sacar el audio a través de una salida externa en la parte trasera. Si bien no le encontramos un buen uso de buenas a primeras nos fue bastante útil cuando conectamos nuestro teléfono vía HDMI para ver videos y necesitamos audio.
Para finalizar el tour visual les mostramos cuánto puede inclinarse el monitor en ambas direcciones, pero debemos reportar que los ángulos de visión no son problema alguno a menos que miremos desde ángulos extremos.
Especificaciones
Resolución: 1920×1080
Tamaño: 21.5″
Conectividad: HDMI, DVI, VGA
Inclinación: +5, -5°
Ángulo Visual: 170°
Relación de aspecto: 16:9
Montura VESA: No
Tipo de Panel: TN
Tipo de Pantalla: Mate
Tiempo de respuesta: 2ms
Instalación
Nos decepcionó encontrar un mísero cable VGA en la caja considerando que el monitor vale CLP $150.000 (USD $300) y por 20 dólares extra puedes comprar un televisor de 32″. El monitor viene protegido con una bolsa para que no se raye y cubierto en empaques varios para asegurar su integridad física.
Algo que en lo personal no me gustó fue que para sacar el monitor éste se debe recostar con la pantalla hacia arriba. Si bien hace mas cómodo desempacarlo vuelve casi imposible guardar la caja sin tener que sellarla nuevamente y puede llevar a muchas personas a cometer el error de transportar un LCD acostado en vez de hacerlo de pie. ¿Por qué digo esto? Porque a mucha gente le ha sucedido que se llevan el LCD acostado en el el auto para su casa luego de revisarlo en la tienda y notan que al llegar éste se fracturó debido a que en esa posición su fortaleza estructural es casi nula. Con un monitor ultradelgado no sé si el problema se acrecienta o disminuye pero más vale prevenir que lamentar.
Una vez que instalamos el monitor todo anduvo a la perfección hasta que instalamos los drivers. Éstos generaron artifacts de imagen y los perfiles de color tienen un bug clásico de Windows Vista y 7 en donde los tonos grises más claros se ven amarillos en vez de blancos. Lamentablemente el único modo de solucionar esto es eliminar todos los perfiles de color de nuestro equipo y sobrevivir como se pueda, por lo que si eres fotógrafo o diseñador deberás esperar a que LG saque una actualización si quieres este equipo.
La calidad de imagen es espectacular. En mi caso personal vengo de un monitor Viewsonic de la época en que Viewsonic hacía buenos monitores para profesionales y el upgrade se hace presente en la gama tonal a todas luces. Está claro que el monitor no tiene un panel IPS como un Cinema Display de Apple o un monitor Dell para ambientes profesionales pero por experiencia en el mundo real les digo que IPS no los hará entregar mejores trabajos y que los pocos lugares que imprimen como corresponde en Chile te entregarán exactamente lo que viste si tienes un monitor de gama media calibrado como corresponde.
Los tiempos de respuesta y brillo dinámico son increíbles, sin filtrados de luz en el monitor por el uso de iluminación LED. Los colores son vivaces y la potencia de iluminación es suficiente como para armar un solarium, por lo que recomendamos sí o sí calibrar previamente el monitor con simples herramientas como la que ofrece Photo Friday. Tal fue el upgrade en calidad que cuando me paso de mi desktop al notebook veo cómo ciertos íconos tienen los colores muy saturados o la gama tonal en algunas imágenes es inferior y no por estar observando de manera acuciosa, sino que el ojo se acostumbra a ver bien.
Y como ya estamos llegando al final de esta revisión se viene la pregunta del millón. ¿Compraría o recomendaría este equipo? Difícil elección. El monitor entrega una calidad de imagen espectacular, responde rápido y tiene un diseño para morirse, pero el bundle que trae es asqueroso para un equipo de ese precio y los drivers inmaduros hacen que sea difícil utilizarlo en un ambiente profesional, puesto que siempre tendremos que confirmar con el printero que los colores se vean bien o pedirle a el que haga las correcciones necesarias. En conclusión no puedo recomendar ni apedrear públicamente este monitor debido a que los pro y los contra son muy relativos al usuario final, pero sí debo decir que si buscan un monitor el LG E2290V es un modelo a considerar sí o sí.