Hace ya un tiempo que Medal of Honor: Warfighter ha estado en el mercado prometiendo una experiencia diferente de la que entregan las otras dos grandes franquicias del genero en el mercado. La idea de una visión más seria y apegada a los problemas que enfrentan los soldados en la vida real es lo que Danger Close quería entregar ¿Aún dudas si MoH: Warfighter vale la pena o no? Échale un vistazo a nuestra review a continuación.
En MoH: Warfighter te pones en los zapatos de la unidad de misiones especiales Tier 1, lo mejor que existe en las fuerzas armadas de los Estados Unidos. La idea era vivir las experiencias que ellos han vivido estando en combate, ver la escena militar con los pies más cerca del suelo, lamentablemente MoH: Warfighter cae en la formula de Call of Duty tratando de entregar una experiencia tapada en acción hollywoodense y además la historia carece de un arco definido, sin momentos memorables ni algún climax.
El problema con MoH es que no ofrece nada nuevo, no nos entrega nada que no hayamos visto ya en uno de los tres mil Call of Duties o Battlefields en el mercado. Prometía algo más emocional y serio con una historia que debería hacernos respetar a los soldados que arriesgan su vida por su nación pero sin embargo en el producto final tenemos una historia totalmente poco interesante, separada en misiones pésimamente relacionadas que varias veces nos hacen olvidar el motivo de porque estamos allí en primer lugar y finalmente ni siquiera logras generar ningún vinculo con los personajes del juego.
Gameplay
Los controles en MoH: Warfighter son muy familiares si ya estás acostumbrado a jugar shooters militares. En MoH: Warfighter dependes de tus compañeros de combate para mantenerte abastecido en munición, varias armas tienen distintos tipos de miras que puedes cambiar rápidamente al presionar un botón y puedes asomarte cuando estás bajo cobertura para preparar mejor tus disparos y cómo se sienten las armas al momento de disparar es genial y muy reconfortante. En algunas misiones en la campaña puedes manejar vehículos, los controles se sienten bastante cómodos y todo funciona fluidamente. En realidad, no hay nada malo en relación a como manejas a MoH: Warfighter, el problema está en que la mayor parte del tiempo poco está realmente bajo tu control.
Durante varias partes de la campaña el juego te quita drásticamente de la experiencia realizando las acciones por ti e incluso tienes una misión donde solamente tienes esperar durante unos 2 minutos hasta que lo único que tienes que hacer es disparar (una vez) un tiro que es imposible que falles ya que está pautado.
Estos pequeños grandes detalles arruinan considerablemente la experiencia para ti, cuando estás bajo fuego enemigo disparando para sobrevivir junto con tu pelotón es realmente reconfortante pero luego suceden cosas como estas y te descolocan demasiado.
En MoH: Warfighter, como en cualquier otro shooter militar, hay momentos donde tienes que atravesar habitaciones en cámara lenta y tratar de matar a todos los enemigos a tiempo. Para cambiar un poco la formula adhirieron un nuevo sistema donde puedes elegir distintos métodos para destrozar las puertas y entrar a estos lugares, lamentablemente es una característica completamente inútil ya que ninguna de las opciones cambia el desenlace de la acción, simplemente la animación que ves antes de entrar. Esto perfectamente pudo haber sido una escena pautada y jamás hubiésemos sentido la diferencia.
Presentación
Frostbite 2 es uno de los mejores motores gráficos actualmente, capaz de entregarnos gráficos que nos dejan con la boca abierta e incluso son bastante impresionantes en consolas, desafortunadamente en MoH: Warfighter este no es el caso. Los modelos de los personajes parecen anticuados y tiene texturas muy poco impresionantes en consolas, el cuento es otro en PC donde los gráficos son realmente espectaculares. Es una verdadera lástima que la optimización para consolas sea tan pésima considerando que incluso Battlefield 3 se veía mucho mejor en ellas. Por otro lado los cinemáticos entre misiones son bastante decentes y muy foto-realistas, lo malo es que estos cinemáticos tienen el fin de generar un vinculo con los personajes pero fallan miserablemente en lograr esto.
El soundtrack deja mucho que desear, de hecho, ningún tema logra generar una atmósfera que logre envolverte en el juego y con lo que está sucediendo. No se cuanto dinero habrán gastado con Linkin Park pero hubiese preferido que hubiesen gastado más en el soundtrack in-game que en una sola canción que escuchas en los créditos y que no aporta absolutamente nada a la experiencia.
Si me preguntan en este momento como se llamaba el villano o incluso el protagonista de MoH: Warfighter no sabría que responderles, ya que ni las actuaciones de voces, ni los cinemáticos o el soundtrack lograron mantenerme interesado en ningún momento por la historia. Call of Duty no tiene el mejor soundtrack ni menos el mejor guión, pero aún así te entrega personajes que recuerdas incluso años después de jugarlos. Por esto es que me decepciona ver a un título que te promete justamente una experiencia más emocional fallar en los aspectos básicos para lograr que los jugadores se sientan envueltos e interesados en su videojuego.
Multijugador
Creo que varios recuerdan al MoH: Allied Assault, tal vez uno de los shooters militares más jugados en línea durante varios años. Allí implementaron características innovadoras y lograron desarrollar una experiencia en línea que mantuvo a mucha gente al frente de sus pantallas por horas. Esto fue hecho durante un tiempo que la tecnología estaba muy limitada y los desarrolladores no tenían todas las herramientas para generar un amplio campo de posibilidades que tienen hoy en día.
Ahora con todas las posibilidades y la oportunidad de innovar y entregar una nueva experiencia en línea, Danger Close entregó una pobre mímica del multijugador en la franquicia de Call of Duty.
Imagínense el multijugador de Call of Duty con el motor gráfico de Frostbite 2, eso es prácticamente todo lo que es MoH: Warfighter. Con una cierta cantidad de diferencias que en vez de enriquecer el multijugador lo único que realmente logran es complicar la experiencia al punto que deseas que simplemente hubiesen copiado el multijugador de Call of Duty al 100%.
Seguramente los familiarizados con Battlefield 3 detesten el equivalente al sistema de squads que tiene MoH: Warfighter, el trabajo en equipo es importante pero aquí logran rotundamente frustrar tus esfuerzos para trabajar en equipo al hacer imposible cambiar tu fireteam estando dentro de un match, lograr configurar el voip para comunicarte con tus amigos y dios perdone al que se desconecte por equis motivo ya que le será imposible volver entrar a su fireteam o incluso al mismo equipo.
Danger Close incluyó bastante contenido en el multijugador con un gran número de naciones que puedes elegir, cada una con sus equipamientos especiales. Hay una gran variedad de armas, personalizaciones y mejores, de hecho, hay tantas opciones para elegir entre clases, naciones, armas y equipamientos que cuesta un poco acostumbrarse un poco a tanto contenido al principio. Sin embargo, una vez que te acostumbras y te familiarizas con todo lo que hay no se te hace nada difícil variar entre las clases y elegir los mejores equipamientos para cada situación. Además, el día que mire la abundancia de contenido como algo negativo creo que me pegaré un tiro en la cabeza.
A pesar de todas sus fallas, aquellos pequeños detalles que a veces te hacen fruncir el ceño y la falta de innovación, el modo en línea llega a ser bastante entretenido en algunos momentos y es un buen escape para cambiar el ritmo de tus otros videojuegos en línea.
Conclusión
Medal of Honor: Warfighter es un juego que existe solo por existir. En un mercado donde no estamos para nada faltas de shooters militares, lo que menos necesitamos es otro más del montón con cero innovación. Medal of Honor era un nombre que solía tener un peso hace unos años atrás, hoy es solo una mímica de franquicias que son mucho mejores. No es un juego aburrido ni tampoco te hará tirar el disco por la ventana, pero es uno que jugarás y luego olvidarás a la semana, un juego que no te entregará nada nuevo ni que te dejará con ninguna sensación diferente al momento que caen los créditos.
El multijugador es lo suficientemente sólido para mantenerte entretenido, con la gran variedad de naciones y las diferentes clases y equipamientos tienes bastante contenido para mucho tiempo más, pero no te esperes un multijugador competitivo al nivel de Call of Duty o Battlefield.
Cuando incluso Call of Duty empieza a alejarse de la escena militar moderna es un indicio de que tú también tienes que innovar en el género y no entregar algo que ya hemos visto durante los últimos 5 años.