La gente de Ojo del Medio notó la «curiosa» diferencia entre la edición de LUN para la capital y regiones, en donde la moral y buenas costumbres de los santiaguinos fueron rescatadas por una valiente alma que decidió photoshopear el pene del perro que aparecía en la portada del popular diario.
La verdad es que no sabemos si censuraron al pobre can por miedo a que un opinólogo notara el «detalle» o simplemente porque la mamá puritana del editor de turno mira con ojo crítico el periódico. ¿Creen que photoshopear los genitales del perro se justifique o la gente de LUN simplemente sobrereaccionó? [Ojo del Medio]