Está muy claro que la «guerra» de las consolas de la nueva generación es muy apretada y que todas las Empresas involucradas intentan mover sus «piezas» de la forma más óptima y resguardándose lo más posible. Una de ellas, Sony, ha puesto mucho en juego con su nueva PS3 y por ello está buscando hacer a todos cumplir las estrategias de mercado impuestas por ella, aunque estas involucren directas amenazas.
A pesar que actualmente sólo existen unas pocas cientos de miles de consolas PS3 en el mundo, Sony ha dejado muy en claro que no quiere que nadie la importe de otros países (especialmente refiriéndose a Europa), amenazando con acciones legales contra cualquiera que así lo haga.
De acuerdo a un reporte de la revista MCV, los abogados de Sony han lanzado una «directa» declaración indicando a los importadores las probables acciones legales que ellos podrían encarar en el caso de traer la PS3 de otro país. La tipificación del delito sería, al parecer, una violación a la marca registrada de la consola.
De acuerdo a la consejera y abogada Mitra Pahlabod,
«En relación a los importadores de PS3s, ellos deben tener presente que cualquier ganancia que ellos hagan al importar consolas a Europa sin el consentimiento de Sony, durante esta Navidad, puede ser muy efímera.«
Los consumidores europeos han puesto el grito en el cielo cuando Sony informó que la PS3 no llegaría a ese continente hasta el próximo año, debido a problemas de fabricación. Esto incluso ha generado que algunos grupos llamen a realizar un boicot en contra de la nueva consola del gigante japonés. La razón por la cual Sony ha llevado a cabo la amenaza, es el hecho que el mercado de la importación, de darse, sería muy lucrativo tanto para los compradores como para los vendedores.
Este anuncio salió a la luz sólo semanas después que una conocida tienda importadora on-line, Lik-Sang, tuviese que cerrar luego de una fuerte batalla legal contra Sony. Lik-Sang dio una gran pelea, llamando incluso a Sony con el término «bravucona» e indicando que la Compañía japonesa nunca tuvo una razón de peso para atacar a la tienda.
Pahlabod sugirió,
«Los dueños de una marca siempre debieran estar al tanto de sus derechos en relación a las importaciones, monitorear muy de cerca la venta de sus productos y cuando sea posible asegurarse que sus registros de marcas estén siempre actualizados.«